El edificio Rosa Agazzi, un icono arquitectónico levantado en 1942, inicia una nueva etapa tras décadas de diferentes usos. Lo que un día fue la primera escuela infantil pública y, más tarde, sede de la Policía Local, se convertirá ahora en una gran sala de estudio y en un punto de encuentro cultural en pleno centro urbano.

Con un presupuesto superior a los dos millones de euros, el proyecto de rehabilitación busca conjugar el respeto por el patrimonio con la creación de instalaciones modernas, accesibles y sostenibles. El plan contempla habilitar alrededor de cien puestos de estudio, zonas de información y espera, salas de reunión y una sala de exposiciones en el jardín. Además, se dará protagonismo a la luz natural gracias a un lucernario central y a un ascensor panorámico que conectará las dos plantas del inmueble.

Una rehabilitación que respeta la historia

El proyecto cuenta con una inversión de más de dos millones de euros y combina la recuperación del ladrillo original con elementos modernos como un lucernario, un ascensor panorámico y una escalera central abierta. El objetivo es mantener la esencia arquitectónica del inmueble al tiempo que se adapta a los estándares actuales de accesibilidad y sostenibilidad.

Un nuevo uso para un edificio emblemático

Las instalaciones ofrecerán cerca de cien puestos de estudio, zonas de información y espera, varias salas de reunión y un espacio expositivo en el jardín. La apuesta es convertir el Rosa Agazzi en un punto de encuentro académico y cultural que dé respuesta a la creciente demanda de espacios de estudio en la ciudad.

El legado educativo de Rosa Agazzi

El edificio lleva el nombre de la pedagoga italiana reconocida internacionalmente por un innovador método basado en la familia y el respeto a la individualidad del niño. Su rehabilitación supone también un homenaje a esta figura y a la memoria educativa de la ciudad, que durante décadas vinculó este inmueble con la formación de los más pequeños.

La recuperación del Rosa Agazzi representa mucho más que una reforma arquitectónica: es la oportunidad de devolver vida a un edificio histórico, convertirlo en un servicio útil para los vecinos y asegurar su valor como referente cultural y social en el futuro.