La Guardia Civil, en colaboración con la Policía Local de Majadahonda, ha puesto en marcha un plan de prevención de robos en viviendas, especialmente en chalés y zonas residenciales, con el objetivo de evitar la actuación de grupos criminales itinerantes que suelen aprovechar la reducción de horas de luz durante el invierno para delinquir.
El dispositivo, activado a finales de octubre, cuenta con la participación de alrededor de 900 agentes, bajo la coordinación de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid y la colaboración activa de la Policía Local de Majadahonda, integrada plenamente en los dispositivos de prevención y control.
Vigilancia reforzada en urbanizaciones y zonas rurales
El plan incluye controles coordinados en vías principales, vigilancia aérea mediante drones con visión térmica y nocturna, y patrullas motorizadas del SEPRONA. Además, se ha incrementado la presencia policial en zonas rurales, urbanizaciones y puntos de acceso al municipio, tanto con agentes uniformados como de paisano, apoyados por equipos de investigación, unidades de reacción, la Agrupación de Tráfico y el Servicio Aéreo.
Con estas medidas, las fuerzas de seguridad buscan anticiparse a los movimientos de grupos organizados que utilizan vías rápidas y caminos rurales para acceder a distintas urbanizaciones, evitando así que puedan establecer rutas de huida o de vigilancia de objetivos.
Llamamiento a la colaboración ciudadana
La Guardia Civil y la Policía Local de Majadahonda han recordado la importancia de la colaboración vecinal para garantizar la eficacia del dispositivo y piden a los ciudadanos que avisen de inmediato al 062 o al 112 si observan personas o vehículos sospechosos en su entorno.
Este refuerzo forma parte de la estrategia permanente de seguridad que ambas fuerzas mantienen en Majadahonda, especialmente durante los meses de invierno, con el fin de proteger las viviendas y reforzar la tranquilidad de los vecinos.